Ayer conocimos el campeón de la 85ª edición de la Liga de Fútbol de Primera División en España. El F.C. Barcelona se proclamó campeón por vigésimo cuarta vez en su historia al ganar en el Nuevo Los Cármenes al Granada con 3 goles de Luis Suárez. La Liga es el torneo de la regularidad y eso significa que a pesar de los altibajos gana siempre el equipo que más puntos consigue, lo cual es más justo que si se disputara el título en play-offs como en baloncesto. El más regular es siempre justo campeón.
Hasta principios de abril nadie dudada que el Barça ganaría el título. Su superioridad era aplastante. Pero llegaron tres derrotas consecutivas, Real Madrid, Real Sociedad y Valencia, y la cosa se complicó tanto que hasta la penúltima jornada Barça y At. Madrid estaban empatados a puntos en la primera posición.
Las sorprendentes derrotas consecutivas y la eliminación en cuartos de la Champions League hizo tambalear la hasta entonces estructura azulgrana. Sin embargo, el sprint final ha sido antológico con 24 goles a favor y cero en contra en los últimos cinco partidos de Liga, 15 de esos goles del uruguayo Luis Suárez, pichichi de la competición y posible Bota de Oro Europeo.
El trabajo del club azulgrana excluyendo ese bajón de abril que casi está a punto de dar al traste con la Liga, ha sido magnífico. Recordemos que Messi estuvo lesionado 2 meses al principio de la competición, allá por octubre y noviembre, y aún así este año el tridente ha funcionado a la perfección, sobre todo Luis Suárez que es un matador al más viejo estilo del ariete de toda la vida.
En el debe azulgrana yo pondría el escaso fondo de armario en materia defensiva que sigue teniendo el club. Mathieu, Vermaelen o Bartra no son sustitutos de garantía para Piqué o Mascherano y estos también tienen sus altibajos. En el debe también pongo la aspereza de Luis Enrique para con la prensa. No se debe menospreciar a los periodistas o despreciar a la prensa cuando las cosas van mal. Hay que tener mucho más tacto, diplomacia y mano izquierda con los medios. Pero claro, si uno es así de arisco por naturaleza, esto no se puede evitar.
Es curioso que en los últimos 25 años, el Barça ha ganado 14 Ligas, cuando en los 60 anteriores había ganado solo 10. Todo empezó en 1991 con un señor llamado Johan Cruyff. En cierto modo, esta Liga ha sido un homenaje al holandés que nos dejó este año. Y así encontramos a gente como Messi o Iniesta que consiguen su octavo título o a Piqué, Alves o Busquets que consiguen su sexto título liguero. Están creando una generación de jugadores míticos que se van a convertir en los más laureados de la historia del club y a veces no se da la importancia que realmente merecen los títulos, tal vez porque ven el triunfo como algo normal, cosa que hasta hace 25 años era la excepción.
Gary Lineker, exjugador británico azulgrana en la década de los ochenta, decía que el fútbol era un deporte de 11 contra 11 en el que siempre gana Alemania. Esta sentencia parece haber cambiado a nivel de clubes a favor de los españoles durante los últimos años, dados los éxitos tanto en Champions League como en Europa League de Barça, Real Madrid o Sevilla. A nivel de selecciones es probable que dicha sentencia tenga su aquiescencia si la disputa de la próxima Eurocopa concede el favor a los teutones tras el éxito mundialista, cosa que parece muy probable.
Por último hago una reflexión final. En el mundo del periodismo deportivo hay mucho opinador y forofo. No hay información porque esta se prostituye con el deseo de fulano o mengano de que su equipo gane. Se pierde la objetividad y sale a relucir el forofismo, el hincha que todos llevamos dentro pero que en un medio de comunicación deberían dejarlo fuera, en la calle. Es sorprendente la cantidad de opinadores madridistas que pueblan las tertulias patrias y que invaden con su fanatismo lo que se supone deberían ser comentarios objetivos y rigurosos de deporte. Es lamentable pero es cierto y esto se ha incrementado sobremanera conforme se acercaba el final de Liga y ésta se decidía en la última jornada.
España es un país de fanáticos, o conmigo o contra mí, o blanco o negro, o izquierda o derecha. No hay medias tintas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario