Laporta habló en modo presidente serio y responsable y dijo que el club está por encima de cualquier jugador. Echó la culpa a la herencia recibida y a la Liga y trató de justificar así la no renovación de Messi. No quedó muy claro porqué si el Barça está fuera de límite en cuanto a tope salarial contratan a cuatro futbolistas para esta temporada: Erik García, Memphis Depay, Emerson y Kun Agüero. ¿Es que estos no cobran?
No sé los cálculos que hayan hecho pero es que Laporta tampoco ha vendido a nadie. No ha entrado dinero en caja por lo que es difícil mantener el nivel salarial y si encimas fichas jugadores nuevos. Si no vendes a nadie, la deuda sigue ahí. El señor Laporta vendió unas expectativas que no eran ciertas pero es que no ha rebajado salarios. Si hubiera vendido a Griezmann, Umtiti, Pjanic, Dembelé y Coutinho, y otros cinco o seis más (incluso Jordi Alba, Busquets o Piqué o Lenglet) y hubiera subido gente de la cantera en su lugar, tal vez hubiera habido posibilidad de conservar a Messi. Pero es que no ha habido movimientos. Bueno sí, ha habido cuatro adquisiciones. Más salarios y gordos. Tenía la posibilidad de vender a pesos pesados y aligerar la masa salarial pero es que no ha hecho nada y esto es responsabilidad de Laporta.
Me hago una serie de preguntas. Si el jugador afirma que él ha hecho todo lo que ha podido por quedarse, que hasta se ha rebajado la ficha un 50%, ¿eso significa que el club no ha hecho todo lo que ha podido? ¿Por qué el club no ha vendido a los osos dorados de Griezmann, Dembelé, Umtiti, Pjanic o Coutinho para aligerar la masa salarial? ¿Es que no sabe, no puede o no quiere? Habría sido una oportunidad magnífica para conservar a Messi y esto lo sabía Laporta desde que ganó las elecciones y antes de finalizar la temporada anterior. Si Messi quiere tanto al F.C.Barcelona como dice entre sollozos, ¿cuál es el salario que aceptaría para quedarse? ¿qué es más importante los colores o el dinero? ¿Estaría dispuesto a jugar sus últimos años casi sin salario simplemente por amor al club que lo ha hecho grande? Esta pregunta se contesta por sí sola. No. ¿Por qué tienen tantas prisas en cerrar el acuerdo cuando el mercado de fichajes no termina hasta creo el 6 de septiembre? Acostumbrados a que el fax de la liga de fútbol profesional eche humo en la última noche del mercado, ahora resulta que cierran con un mes de antelación. ¿Por qué no pueden esperarse al cierre de mercado?
Yo no sé si Messi tendría posibilidad de haberse quedado y si existe control por parte de la Liga en cuanto a nivel salarial. Lo cierto es que no hay transparencia en materia económica respecto a los clubes de fútbol. Hacienda tiene un filón ahí en cuanto a investigación de las finanzas de los clubes de fútbol. Son sociedades opacas, que no rinden cuentas a nadie, que hacen contratos multimillonarios con entradas y salidas por otro lado y que el común de los mortales ignora porque nos distraen con el viejo lema de "pan y circo" o "pan y toros", te atontan, te adormecen y así no piensas.
Fuera de lo que es o puede ser el conflicto económico subyacente en esta controversia, que no sé si algún día sabremos realmente lo que ha ocurrido, lo que es cierto es que en la Liga se abre un socavón de dimensiones descomunales. Deportivamente se va el mejor jugador de la historia del fútbol y del F.C. Barcelona, equipo este que vagará por una travesía del desierto que no sabemos cuánto dure. El hueco que deja Messi es inmenso, inabarcable, no solo para el club, sino para la competición liguera.
Nos hemos convertido en una Liga de chichinabo, ya lo éramos, pero ahora aún más. Estamos a años luz en cuanto a competitividad de la Premier League, donde puede haber hasta seis o siete equipos a un nivel competitivo muy alto en todas las competiciones tanto internas como externas.
Bien es cierto, que Messi cuenta ya con 34 años y puede tener como mucho dos años más al máximo nivel y eso lo sabía el astro argentino. Pero lo suyo hubiera sido haber terminado en el club de su vida, ser un one club man. Se va por la puerta de atrás como muchos se fueron en su momento. Parece un sino de nuestra Liga.
Parece obvio que el destino de Messi será París, un club donde tienen el dinero por castigo y parece ser que eso de los topes salariales es una pantomima que se la saltan por todos sitios. Los Donnarumma, Di María, Ramos, Neymar, Mbappé y ahora Messi prácticamente no deben cobrar nada ya que nadie les dice nada, viven de lismona. ¿Dónde está aquí el fair play financiero? No entiendo nada. En unos sitios hay control y me parece muy bien y en otros se puede fichar a diestro y siniestro sin dar explicaciones.
La Liga francesa, la Ligue One, creo que así se llama, tiene el aliciente de un equipo multimillonario dependiente de Emiratos Árabes o de Qatar, no sé muy bien. Todos los demás clubes no pintan nada. Si ahora fichan a Messi, deberían ganar la liga por 30 puntos de diferencia o más con el segundo y resulta que perdieron la Liga el año pasado y no llegaron a la final de la Champions.
A veces el maldito dinero no lo es todo en el fútbol y cuando ocurre que el gigante pierde a manos del pequeño, puedes pensar que el fútbol merece la pena.
Viendo la presentación que han hecho en París tres días después de despedirse entre sollozos en Barcelona, pienso que las lágrimas derramadas parecían más de cocodrilo. Hay que ver qué pronto volvemos a reír en cuanto firmamos un contrato de 35 millones de euros anuales. A rey muerto, rey puesto. Déjate de colores. Desde Luis Arconada no ha habido one club man que sientan los colores con los que uno nace.
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