El firmamento cinematográfico se ha llenado este año de estrellas. Fíjense si ha sido nefasto este 2020 que, los dos actores centenarios que aún sobrevivían del Hollywood dorado de los años cuarenta y cincuenta del pasado siglo, se han ido en este fatídico año. Kirk Douglas y Olivia de Havilland eran los últimos supervivientes del Hollywood clásico. Se ha ido la sonrisa pícara del hijo del trapero con el hoyuelo en la barbilla más famoso de la historia del cine. Junto a ellos se han ido otros menos notables pero muy significativos: el mejor James Bond (Sean Connery), el mejor silbido (Ennio Morricone) o justo la guadaña (Max Von Sydow), también nos han dicho adiós. Repasamos las estrellas más rutilantes que nos han dejado.
Comienzo por lo más alto. Ya los he aludido antes. Kirk Douglas y Olivia de Havilland. Espartaco y la prima Melania. Dos supervivientes de un cine que ya no se hace. El cine de hoy es pura tecnología. Se acabaron los rodajes con miles de extras. Hoy el ordenador lo hace todo.
Continuo con grandes rostros como el sueco Max Von Sydow, el alter ego de Ingmar Bergman, su actor preferido, el inolvidable Padre Merrin de "El exorcista". El escocés Sean Connery ha sido el primer y el mejor Bond de la historia del cine sin desmerecer a los demás. Con "El hombre que pudo reinar" o "Los intocables de Elliot Ness" alcanzó la cima de su carrera. El italiano Ennio Morricone era inconfundible en sus bandas sonoras: siempre había un efecto percusionista en sus composiciones. Fueron míticas las que compuso para Sergio Leone, incluida la última de este, la inmortal "Érase una vez en América".
Stuart Whitman fue un actor secundario que brilló en westerns como "Los comancheros", la última obra de Michael Curtiz. Rhonda Fleming era una pelirroja preciosa en películas como "Cuando ruge la marabunta" o "Duelo de titanes". Shirley Knight estaba radiante en "Dulce pájaro de juventud".
En Europa, hemos perdido también al galés Terry Jones, uno de los miembros de la Monty Pithon. Lucía Bosé se dio a conocer en España con la mítica "Muerte de un ciclista" de Juan Antonio Bardem. El británico Ian Holm fue un actor muy versátil en grandes producciones. Recordamos "Alien" o "El señor de los anillos". Alan Parker dirigió grandes películas como "El expreso de medianoche", "El corazón del ángel" o "Fama". El francés Michel Piccoli se recordará por trabajar con Buñuel y Berlanga en "Belle de jour", "Diario de una camarera", "Tamaño natural" o "París-Tombuctú".
Es curioso. Han fallecido dos chicas Bond: Honor Blackman (Goldfinger) y Diana Rigg (007 al servicio de su majestad). Tan malo ha sido el año que Darth Vader ha muerto. El actor que lo encarnó, el británico David Prowse también falleció en este 2020.
En el terreno patrio no quiero olvidarme del gran José Luis Cuerda: "alcalde, todos somos contingente, pero tú eres necesario". Autor de obras maestras como "Amanece que no es poco", "La lengua de las mariposas" o "Los girasoles ciegos". No me olvido tampoco de la gran showman, Rosa María Sardá, polifacética donde las haya. Han fallecido directores como Rafael Romero Marchent, Julio Diamante, Paco Betriú o Gerardo Vera. También para el recuerdo la actriz Marisa de Leza, la inolvidable madre de "Valentina".
El surcoreano Kim Ki-duk fue uno de los últimos en dejarnos.
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