Quisiera hacer algunas valoraciones acerca de la entrega de los Premios Goya el pasado domingo 19 que premiaban el cine español del 2011. El resultado me pareció bien, lógico y previsible a la vista de las opciones presentadas.
La cinta ganadora, "No habrá paz para los malvados", obtuvo 6 premios, entre ellos los principales de película, director, actor protagonista y guión adaptado. Nada que objetar al respecto. Me parece justo premiar el trabajo de un gran director como Urbizu, premiar un thriller en el cine español y una interpretación masculina protagonista soberbia, a juzgar por las críticas recibidas. Se lo merece Urbizu tras una trayectoria maldita y nunca bien reconocida.
Sorprende encontrar en segundo lugar, la cinta de Mateo Gil, "Blackthorn. Sin destino", un western rodado en el altiplano boliviano y ganador de 4 estatuillas de carácter técnico pero igualmente meritorias, como la fotografía de Juan Ruiz Anchía, la dirección artística, el vestuario y la dirección de producción. Excelente.
También destacable la cinta de Pedro Almodóvar, "La piel que habito", aunque con muchas nominaciones, conquistó 4 cabezones, entre ellos la de mejor actriz protagonista para Elena Anaya y la música original para Alberto Iglesias. Lo de este compositor es tremendo. Es de nota. El donostiarra Alberto Iglesias consigue su décimo Goya de doce nominaciones a lo largo de su carrera. Todo un récord. Además, el próximo domingo, está nominado nada menos que al Óscar por la banda sonora de "El topo" y codeándose con el mismo dios de la música de películas, con un John Williams nominado por partida doble. Ahí es nada.
Por lo demás, destacar también los premios, tres, a la debutante "Eva", de Kike Maíllo, una original y novedosa apuesta por la ciencia-ficción en España, que ha tenido su recompensa con el Goya a los efectos especiales así como a la interpretación masculina de reparto para el gran Lluis Homar y la dirección novel para el propio Maíllo, un joven catalán que hizo un extraordinario discurso de agradecimiento sin olvidar sus raíces humildes y en defensa de la escuela pública. Lo mejor de lo que se escuchó en la Gala.
En definitiva, creo que ha habido buenas películas en el 2011 en España y sobre todo se ha innovado mucho en los géneros y eso es bueno. Lejos del tradicional drama o la manida comedia, resulta que somos capaces de hacer thriller, western y ciencia-ficción de muy buena factura y calidad como lo demuestra la cosecha del 2011.
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