Roy Batty

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lunes, 19 de septiembre de 2011

Lituania

El campeonato de Europa conseguido ayer por la selección española de baloncesto, nos equipara al nivel de las más grandes selecciones de la Historia, al nivel de la mítica Yugoslavia (aquélla también dirigida por Ivkovic con Petrovic, Kukoc, Radja, Divac y compañía, o de la mítica URSS de los años ochenta del pasado siglo, y conseguido nada más y nada menos que en un escenario histórico y extraordinario, la cancha del Zalguiris Kaunas, áquel equipo emblema del baloncesto soviético de los ochenta y cuna de mitos como Arvydas Sabonis, Rimas Kurtinaitis, Valdemaras Homicius, Sergei Iovaisha ó Sarunas Marchulenis. Ahí es nada. Estamos viviendo la época más dorada del deporte español en su Historia.
 La verdad, es que este Europeo de baloncesto, probablemente ha contado con la mayor concentración de grandes jugadores NBA europeos por metro cuadrado. Cada selección ha contado con todas sus estrellas y al final ha ganado la mejor. España goza de la mejor generación de jugadores de su historia. No sabemos hasta cuándo durarán los Gasol, Felipe, Navarro y Calderón, la base de esta selección, pero sí sabemos que hay continuidad porque los Ricky, Rudy, Llul, San Emeterio, Sada, Marc, Ibaka ó Claver, les quedan muchos años por jugar y garantizan la continuidad de un bloque compacto y muy competitivo. Hay relevo y del bueno.

La revelación del Europeo ha sido la selección de Macedonia, otra de las extintas repúblicas balcánicas, que no hace sino producir jugadores de baloncesto. Con un baloncesto primitivo pero tremendamente efectivo ha sido capaz de llegar hasta semifinales. A destacar, su base americano nacionalizado, Bob McCalebb y un armario ropero de 2 metros 15 centímetros llamado Pero Antic que lanza triples desde más de siete metros y los anota.

Creo sinceramente, que si la URSS y Yugoslavia no se hubieran desmembrado, habría dos selecciones ahora mismo capaces de plantar cara a la mismísima selección americana NBA junto con España. Es impresionante la gran cantidad de jugadores que han "criado" estas madres patrias en sus "hijos" desmembrados. Ahí están los Valanciunas, Kaukenas, Kirilenko, Jasaitis, Kryapa ó los Teodosic, Dragic, Krstic, Antic, Ilievski, Savanovic, y compañía que han mostrado un nivel de juego impresionante.

La decepción, tal vez haya sido la del anfitrión, Lituania, que estaba obligada a ganar, y si no a luchar por el título. Pero no pudo con un rival teóricamente asequible como Macedonia en cuartos. Para un país que mama baloncesto por cada uno de sus poros como es Lituania, la decepción ha sido grande. No obstante, cuentan con un plantel magnífico, aunque tal vez se ha visto mermado por las ausencias de Linas Kleiza y Petravicius. El incombustible "Saras" Jasikevicius sigue a sus 35 años dando un ejemplo de buen hacer y buen baloncesto. Quinto puesto para la selección anfitriona.

Las ausencias más significativas han estado del lado griego. No se entiende que cuando todos los equipos vienen con sus grandes figuras para tratar de clasificarse para los Juegos Olímpicos de Londres del año que viene, ó en su defecto, para el Pre-Olímpico, no se entiende que a la selección helena renuncien a venir estrellas de la talla de Papaloukas, Spanoulis, Diamantidis ó la criatura de Schortsanitis. Su presencia hubiera dotado al Europeo de un nivel muchísimo mayor. Aún así han hecho sextos y se clasifican para el Preolímpico.

También quisiera destacar la presencia del gran Dirk Nowitzki, en el que probablemente sea su última participación con la selección germana. El ala-pívot de los Mavericks, actual campeón de la NBA, no ha podido hacer que su selección se clasificara para cuartos. Probablemente, Dirk Nowitzki sea actualmente el mejor jugador europeo de la Historia, con permiso de Pau Gasol y uno de los mejores del mundo, no en vano ya fue elegido un año MVP de la NBA. Bravo por el teutón.

En fin, que ha sido un magnífico Europeo, con partidos brillantes y un nivel de juego espectacular en muchos de ellos. Al final ganó el mejor y el MVP para "la bomba" Navarro, un jugador impresionante que no necesita estar en la NBA para dar brillo y lustre a España y Europa.

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