Ha ganado Pedro Sánchez claramente y lo que toca es apoyar y arropar a Pedro para que gane la batalla a la derecha. Las elecciones a secretario general han sido modélicas. Ha votado un 65% de los militantes, más de 130.000 y han dictaminado claramente que quién debe dirigir el partido sea Pedro Sánchez. Espero que pueda trabajar con libertad y aunar todas las sensibilidades existentes en el partido pero sobre todo dar el giro a la izquierda que le piden las bases.
Confieso que no he votado a Pedro. He experimentado una evolución como la de Saulo en este proceso. Al principio veía bien e ilusionante la candidatura de Pedro Sánchez. Era aire fresco y no estaba contaminado. Tenía buena imagen y sonaba bien. Pero he ido viendo cosillas que no me han gustado y me han hecho cambiar de parecer. Veía como sinónimo de coherencia a José Antonio Pérez Tapias. Hasta última hora dudé en si votar a Madina o a Pérez Tapias. Decidí finalmente decantarme por el vasco, más que nada porque creía que sería más útil que el andaluz en cuanto a defensa de los postulados de izquierda. Y también pensé en los ataques furibundos soterrados sufridos desde dentro y desde fuera contra el vasco Madina. Me mosquea mucho que personajes tan deleznables de la derecha mediática como Inda o Marhuenda, omnipresentes en televisión diariamente, apoyaran claramente a Pedro Sánchez. Afortunadamente esta gente no vota pero sí influye en sus medios en una determinada dirección para sus propios intereses, que no son otros que querer que el PSOE se hunda en el fango por los siglos de los siglos.
Ahora lo que toca es apoyar a Pedro Sánchez y que ponga en práctica todo lo que ha propuesto como vías de regeneración democrática y de vuelta a los ideales de izquierda del partido. Eso sí, deseo que convoque las primarias a candidato de la presidencia del gobierno en noviembre y se presente para ser coherente con su programa. No me gusta que los que se presenten a la secretaría general luego no opten a la candidatura a presidencia del gobierno. No lo veo coherente. Y por supuesto, me parecería una desfachatez que de ello se aprovecharan candidatos o candidatas que no se han manchado las manos en esta refriega de elección a secretario general, y acudan como salvadores de la patria.
Iremos viendo y comentando impresiones.
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