Ha concluido la vigésimosexta edición del Campeonato del Mundo de balonmano de selecciones masculinas con el triunfo de Dinamarca, co-anfitrión del torneo junto con Alemania, por primera vez en su historia. Con este triunfo los daneses consiguen la triple corona: europeo, JJ.OO. y Mundial. Han ganado todos sus partidos, los diez que han disputado y de forma arrolladora. El cuadro de competición les ha favorecido puesto que los grupos A y B eran mucho más competitivos que los grupos C y D en el que daneses y noruegos han encontrado poca resistencia. Mikkel Hansen ha sido el mejor jugador del torneo y máximo goleador. La final prácticamente no ha tenido historia puesto que desde el minuto 10 los daneses han puesto tierra de por medio frente a Noruega. Justo campeón Dinamarca.
El equipo ideal del Campeonato está integrado por Niclas Landin en la portería, sin duda el danés ha sido el mejor portero del torneo. En el extremo izquierdo se sitúa el noruego Magnus Jondal. Lateral izquierdo para otro noruego, Sander Sagosen, ahí es nada. Ejerce de central el danés Rasmus Lauge. Lateral derecho para el alemán Fabian Wiede. Extremo derecho el español Ferrán Solé. Y como pivote ha sido elegido el noruego Bjarte Myrhol.
Y poco más que decir de este campeonato. España se ha visto relegada al 7º puesto tras su caída en la main round frente a Francia. Del mal, el menos. Por lo menos ha conseguido plaza para jugar el Preolímpico del año que viene. Hay mucha competitividad en este deporte. Hay que reconocer que el cuadro de competición no le ha favorecido mucho a los españoles. Han jugado por la parte del cuadro con sede en Alemania y eso significaba cruzarse con Croacia, Alemania y Francia.
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