Final Four y Zeljko Obradovic

Los dos términos citados en el título son consustanciales. Van unidos indisolublemente. Hoy se disputa la 58ª edición de la máxima competición baloncestística europea a nivel de clubes, la llamada Final Four de la Euroliga de baloncesto. Se disputa en Madrid y concurren a la cita el Real Madrid, equipo anfitrión que disputa su tercera Final Four consecutiva, el Fenerbace Ulker turco, el CSKA ruso y el Olympiakos griego. A priori, el Real Madrid es el principal favorito, no solo por juego sino por anfitrión y se puede decir eso de que a la tercera va la vencida. Pero en baloncesto no hay nada escrito y menos en un juego donde está presente Zeljko Obradovic, los rusos del CSKA o los incombustibles griegos al mando de Spanoulis. No hay nada seguro en este juego.

Zeljko Obradovic se ha plantado en esta Final eliminando al actual campeón de Europa, el Maccabi de Tel Aviv, con un equipo competente pero no de estrellas. Ha sabido modelar y adaptar a su juego a buenos jugadores como Bjelica, Preldzic, Bogdanovic, Zisis, Zoric o Vesely. Se enfrenta al Real Madrid en semifinales. Y yo que el Madrid no me fiaría absolutamente nada. Obradovic es un animal baloncestístico europeo. Es el técnico más laureado de Europa. Ha conseguido 8 Euroligas en 12 presencias (esta es su décimotercera) con 4 equipos distintos: Partizán, Joventut, Real Madrid y Panathinaikos, éste último con 5 entorchados. Una barbaridad.

El Real Madrid tiene que hacer valer el factor cancha y está obligado a ganar por lo civil o por lo criminal. No tiene otra. Esa es la gran presión que tiene. En condiciones normales ganaría la semifinal al Fenerbace turco, pero.... todo es posible en el deporte de la canasta y más en partidos que son finales.

El otro emparejamiento parte con ventaja, yo creo, el CSKA ruso, donde la columna vertebral la forma la armada rusa con Kirilenko, Khryapa o Kaun comandados por el gran Teodosic o De Colo. En teoría deben deshacerse del Olympiakos griego. Pero es que estos son también animales hechos para competir y plantarse en las finales. Ya ganaron las ediciones del 2012 y 2013.

En fin, que todo puede pasar cuando están presentes estos actores en este escenario. Lo normal sería una final Real Madrid-CSKA Moscú, con triunfo, ya va siendo hora, para los blancos. Pero es que no hay nada normal en este deporte afortunadamente. A disfrutar del espectáculo.