El rey Bolt ha sido destronado en su última carrera de 100 m por el polémico atleta estadounidense Justin Gatlin. La verdad es que el jamaicano ha salido mal, lo ha hecho así en todas las series que ha disputado en este Mundial, y le ha sido imposible remontar. Creo que no ha acudido en su mejor forma y ha vivido de los réditos de su clase. Ha sido tercero con 9.95 detrás de Gatlin campeón con 9.92 y Chris Coleman (ojo con este joven atleta porque va a dar mucho que hablar) con 9.94. Termina aquí la carrera del hombre más rápido de la historia no en lo más alto sino con un bronce. Parece una amarga despedida pero no lo es. Es un broche de bronce a una carrera dorada.
Esto ha sido lo más significativo de la segunda jornada de los Mundiales de atletismo de Londres. Ayer se vio una excelente carrera de 10.000 hombres donde a Mo Farah le costó bastante ganar. No ganó con la claridad de los últimos años.
Hoy en 10.000 mujeres, la gran Almaz Ayana ha dado un auténtico recital. No había corrido ninguna carrera este año, estaba desaparecida en combate y ha despejado todas las dudas con una carrera en la que el último 5000 ha sido de órdago doblando a casi todas sus rivales. Segunda ha sido su compatriota la gran Tirunesh Dibaba, una de las más grandes fondistas de la historia y todavía poseedora del récord mundial de 5000 hasta que Ayana se decida a batirlo.
Y poco más que añadir a lo que llevamos. En longitud hombres ha ganado el favorito, el sudafricano Luvo Mayonga, con un salto de 8.48 m. Y en disco no ha ganado el favorito, el sueco Daniel Stähl, que se ha quedado a dos centímetros del oro, que ha sido para el lituano Gudzius.
Quiero hacer un comentario acerca de la retransmisión por televisión en Teledeporte. Me da angustia escuchar a los comentaristas, sobre todo a los técnicos. El tal Gerardo Cebrián y Juan Carlos Higuero se las dan de sabios, se las dan de que saben más que nadie de atletismo con datos y datos históricos, sobre todo el Cebrián, pero no dan ni una en los pronósticos que hacen.
Enseguida se encandilan con una carrera y tan pronto suben a los altares a un atleta como al minuto siguiente lo descienden a los infiernos. Confunden sus deseos con la realidad y así es difícil hacer una retransmisión objetiva. Se han despachado de manera bestial contra Justin Gatlin, recordando su pasado de dopaje hasta la saciedad, los silbidos de la afición, etc... para tratar de ocultar la derrota en mucho tiempo de Bolt. Ha sido una retransmisión con comentarios vergonzosos, subjetivos y deleznables.
El señor Gatlin, que puede que no sea de mi agrado, es cierto que ha estado sancionado por dopaje, pero le han permitido volver y mientras no se demuestre lo contrario ha ganado la carrera en buena lid. Tiene tanto derecho a competir como los demás. Ha competido limpiamente, hasta que no se demuestre lo contrario, y ha ido ganando y clasificándose carrera a carrera. Tenía tanto derecho a ganar como cualquiera de los restantes finalistas. Yo apostaba por Chris Coleman porque ha dado unas magníficas sensaciones y a punto ha estado de hacerlo. Pero, una vez terminada la carrera hay que felicitar al campeón porque ha ganado en buena lid, y ha sido vergonzoso el trato dado por la televisión a Gatlin, al que prácticamente no han sacado y dedicándole todo el tiempo a Bolt, que ha sido tercero.
Gatlin ha callado muchas bocas sobre todo a los bacines y burracos de Teledeporte que se las dan de listos y no aciertan ni una. Y cuando no ganan los que ellos dicen se ponen a despotricar al que ha ganado. El comentario de Cebrián diciendo que él no quería que ganara Gatlin ha sido la puntilla para una retransmisión vergonzosa. A veces tal vez sea mejor llevar a menos catedráticos de atletismo y hacer una retransmisión objetiva alejada de comentarios y deseos personales.
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